
¿Necesitas ayuda de un otorrinolaringólogo?
Tratamiento para los pólipos nasales
Agenda una cita con el Dr. Lech si necesitas tratar un pólipo nasal, él cuenta con una técnica quirúrgica impecable.
Contáctanos
Se trata de la producción de una masa blanquecina y benigna dentro de los tejidos internos de la nariz o senos paranasales, generalmente aparecen después de un cuadro inflamatorio y pueden crecer tanto que pueden obstruir por completo las fosas nasales.
Los pólipos nasales pueden pasar desapercibidos por largo tiempo ya que no representan ninguna molestia para el paciente hasta que empieza a bloquear la circulación del aire por la nariz.
Las personas que desarrollan estás formaciones de masa suelen padecer dificultad para respirar, ronquidos, anosmia que es la distorsión del olfato y un aumento en la mucosidad nasal.
Es una afección que puede presentarse en niños y adultos.
Hasta el momento no se ha podido identificar una causa específica por la que aparecen, sin embargo, hay un factor de riesgo que aumenta las probabilidades en un paciente de desarrollar los pólipos y son los cuadros inflamatorios como la sinusitis y rinitis.
Por esta razón, después del tratamiento el paciente debe seguir un tratamiento específico dirigido a la solución de la causa alergológica para evitar otros cuadros inflamatorios y encontrar una mejoría real a largo plazo.
Cuando estás masas blandas y benignas alcanzan un tamaño que perturba la circulación del aire y la mucosa de la nariz es necesario hacer una intervención quirúrgica que extraiga el pólipo.
La cirugía se lleva a cabo por un proceso endoscópico poco invasivo que permite la manipulación y extracción de la masa sin comprometer otras zonas de la nariz.
El tratamiento quirúrgico se llama endoscopía endonasal, se emplea un endoscopio que se introduce por la fosa nasal junto con una cámara que le permite al médico otorrinolaringólogo observar el interior de la fosa y seno paranasal.
Se trata de un procedimiento con un riesgo mínimo y acompañado con un cuidado post operatorio apropiado puede garantizar una solución a largo plazo para que no reaparezca esta afección.
Los pólipos en la nariz de los niños son comunes, suelen generar obstrucción para respirar y deformaciones en la nariz ya que son evidentes a simple vista.
El tratamiento tradicional para esta afección, en adultos y niños, es el uso de corticoides nasales u orales que pueden ayudar a disminuir el tamaño de la masa.
Sin embargo, la efectividad de este tratamiento dependerá del tamaño del pólipo y de las molestias que cause. Aún en niños se recomienda el proceso quirúrgico con endoscopio en caso de que el tratamiento farmacológico no funcione.
La intervención endoscópica nasal asegura una incisión mínimamente invasiva y pocos riesgos después de la cirugía. Aunque, no asegura que se vuelva a desarrollar otra masa en el tiempo.
Agenda una cita con el Dr. Lech si necesitas tratar un pólipo nasal, él cuenta con una técnica quirúrgica impecable.
Después de una cirugía los cuidados básicos son establecidos por su médico de confianza, así como los medicamentos que debe utilizar y las medidas que debe evitar para no complicar la situación después del procedimiento.
Aunque se trate de una intervención mínimamente invasiva, es un procedimiento donde se pierde sangre y se deben tomar medidas de cuidado como:
No se debe sonar la nariz al menos por dos semanas después de la operación, la presión ejercida por el aire puede producir una hemorragia. La secreción nasal es normal durante la recuperación de la cirugía se puede usar un pañuelo desechable para limpiar externamente el exceso de secreción.
Podrá implementar la solución salina para mantener la fosa nasal y las heridas limpias y así evitar infecciones, el uso de estos lavados debe ser especificado por el médico, sobre todo la técnica y la frecuencia.
Los movimientos bruscos, los esfuerzos al cargar peso, las actividades físicas de impacto e incluso el pujar para evacuar puede causar sangrado en la nariz recién operada. Lo ideal es guardar un reposo leve durante las siguientes dos semanas después de la cirugía.
El hielo es un elemento fantástico para disminuir la inflamación y aliviar el dolor, después del primer día de la cirugía se puede optar por hacer esta terapia de frío durante 15 o 20 minutos cada vez que sienta dolor.
Asegura una recuperación más rápida ya que ayuda a disminuir la inflamación, al mismo tiempo ayuda a respirar mejor, para lograrlo el paciente puede emplear 2 o 3 almohadas al dormir.
Seguros con los que trabajamos
Quiero y puedo ayudarte a recuperar tu salud.